RESEÑA La Tierra de la Traición

 
Autora: Arantxa Comes

Editorial: Munyx Editorial, 2020

Corrección: Pablo Hernández

Rústica con solapas / ebook, 480 págs.

Bilogía #1

Género: Fantasía, Juvenil

Bajo la atenta mirada de los cuervos, la vida de los habitantes de Brisea discurre con aparente normalidad. El país está a punto de conmemorar el trigésimo aniversario de la desaparición de la Isla, una tierra extraordinaria que era capaz de emerger y sumergirse cada cierto tiempo. Los isleños que no se marcharon aún sufren las consecuencias de lo que muchos consideran una traición, pero todo está a punto de cambiar.

En medio del mar aparece un muerto. En un cementerio nace la revolución.

La amenaza se cierne sobre un grupo de jóvenes, los secretos de un pasado que está más presente de lo que sus familias se atreven a confesar. Brisea no ha curado sus heridas y, mientras algunos juegan con ellas, hay nombres y apellidos que, aunque permanezcan ocultos, no deben ser olvidados.

Ya son varias las novelas que he podido leer de Arantxa Comes y me sigue demostrando con cada una que tiene un talento adquirido con esfuerzo para convertir reivindicaciones reales en ficción y que las hagamos nuestras, logrando que las comparemos con nuestras propias injusticias y despertando conciencias sin que nos demos cuenta. Después de publicar su trilogía El don de la diosa, cuya reseña de la primera parte podéis ver por aquí, vuelve al catálogo de Munyx Editorial con una bilogía más fantástica que de ciencia ficción en esta ocasión. Con capítulos muy cortos y multitud de personajes y subtramas, ha conseguido construir una historia con mundo y carácter propios y muy originales. Sin embargo, reconozco desde ya que mi opinión ha podido verse algo influenciada debido a que es el tercer libro de temática y dinámica similar que he leído en poco más de dos meses y mi ansia por leer algo de este estilo ha podido verse afectada porque yo misma me he saturado de este género fantástico-político-reivindicativo-revolucionario. Aun así, intentaré transmitir mis impresiones lo más objetivamente posible al margen de esta apreciación personal.

Dos pilares fundamentales sostienen esta gran historia: los personajes y el worldbuing. En este sentido, para mí no ha sido ninguna sorpresa ya que estas parecen ser las señas de identidad de Arantxa Comes como nos ha demostrado también en El don de la diosa. Sin embargo, a pesar de que podría ir ya prevenida, nada más comenzar a leer he tenido problemas con ambos aspectos hasta bien entrada la novela en materia hacia la mitad del libro. Todo comienza súper confuso, dando por hecho que el lector domina la ambientación, el contexto, la historia pasada y las situaciones presentes de cada personaje que va interviniendo. No tengo nada en contra de esta forma de narrar, y soy consciente de que suele ser la predilecta de los autores de fantasía épica, principalmente. Soy de la opinión de que tampoco se nos tiene que dar todo mascado a los lectores, porque para eso existen otro tipo de lecturas más ligeras. Aunque estoy segura de que yo no tenía el mood para concederle toda la atención que requería lo que iba leyendo en los primeros capítulos. No me enteraba prácticamente de nada, me hacía un lío con casi todos los nombres y no sabía ni en qué ambientación me estaba moviendo (¿pseudomedieval? ¿distopía steampunk? ¿oriental contemporánea?), ni idea y me perdía constantemente intentando relacionar los parentescos y las relaciones entre cada grupito de personajes. Lo único que tenía meridiano eran los shippeos que se intuyen casi desde el principio, pero aun así creo que me hubiera venido bien alguna guía de personajes al final del libro, incluso un mapa esquemático con los puntos más característicos para poder situar dónde está cada uno en cada momento, a pesar de que se indica en los inicios de capítulo el lugar en el que transcurre cada escena (es solo que no las situaba geográficamente, digamos). De todas formas, de nuevo lo achaco a mi falta de atención suficiente que requería ese esfuerzo extra por mi parte, sobre todo al principio.

Una vez que logré situarme, todo ha ido más rodado. Tenemos sobre el tablero un montón de personajes de dos generaciones distintas, aunque los protagonistas son los jóvenes (intuyo que esto puede cambiar en la continuación y desenlace de la bilogía), de distintos estratos sociales, con distintos papeles y motivaciones. La autora nos sitúa en una sociedad algo totalitaria basada en la meritocracia, en la que el gobierno lo componen personas llamadas Expertos, que dominan alguna faceta necesaria para el progreso (industria, mecánica, etc.) y al frente de todos ellos hay un dirigente principal, conocido como Experto Superior que debe ser elegido y por ello no puede tener descendientes directos para que esa sucesión “democrática” no se pueda ver comprometida. La sucesora elegida del Experto Superior es Myllena, quien ya había sido seleccionada cuando era aún muy niña y hasta ahora se ha estado formando para llegar a ser digna del cargo y de toda la responsabilidad que se espera de ella al frente del gobierno de Brisea. Por el contrario, el hijo biológico del actual Experto Superior, Cassian, debe vivir sabiendo que nunca debió haber existido (sí, su papá se saltó las normas teniendo un vástago prohibido y lo paga el hijo con el rechazo de los demás, as always). El primer conflicto argumental del que parte este inicio de la bilogía es que ambos están a punto de ser asesinados sutilmente y empiezan a sospechar erróneamente el uno de la otra, cuando en realidad lo que hay detrás es una enorme conspiración de la que empiezan a ser conscientes, pero sin imaginarse las dimensiones del complot ni hasta dónde llegan los hilos de los traidores y no saben en quién confiar en esa especie de “corte” de privilegiados en la que viven, salvo quizás en Duna, la escolta personal de Myllena a quien le gusta tener tan cerca que hasta comparten sábanas, y en Mats, compañero de clase de Cassian con la delicadeza de un gorila a la hora de tirarle los trastos en cada conversación que tienen, casi ninguna en serio.

Por otro lado, hay varios personajes en los distritos más pobres de la capital de Brisea y algún otro punto esparcido por el mapa del país, cuyas tramas y subtramas se van enlazando a esa principal que es la conspiración. Se unen además las ansias de revolución y el afán de justicia que sienten hacia los habitantes de una isla sumergida muy curiosa, que a temporadas subía a la superficie hasta que dejó de subir tras desaparecer, hace ya 30 años, sin motivo aparente. El toque de fantasía lo aporta lo que parece ser la causa de que ese hundimiento de la isla fuese en realidad un exterminio de sus habitantes, ya que el continente de Brisea pretendía hacerse con el control de la argamea, una especie de materia/energía que podríamos decir que es el equivalente a la magia. También he notado cierto ambientillo steampunk en algunos detalles, no solo porque hay disciplinas evidentes como la industria o la mecánica, sino porque se hace alusión a caballos de hierro, por ejemplo, para evitar utilizar animales de verdad en carreras. Pero en general, todo gira en torno a esa injusticia en el reparto de los recursos, ese pasado vergonzoso que dejó cicatrices aún sin cerrar y esos personajes que buscan una manera de mejorar el mundo que les han dejado las generaciones anteriores. Una vez localizados y diferenciados todos los engranajes argumentales, ha sido una gozada ver cómo funcionaba la maquinaria entera con unos y otros trazando planes, forjando alianzas, desenmascarando traidores, sacrificándose por la causa y descubriendo los secretos sobre sus verdaderos orígenes.

No tendría sentido que me explayara en contaros más detalles de cada personaje porque cada uno es único en sí mismo, con motivaciones y personalidades muy diferentes y hay material de sobra para shippear un montón de parejas, algunas demasiado evidentes desde el principio y otras que se van calentando lentamente. Aquí los convencionalismos brillan por su ausencia total, creo que apenas hay una sola pareja hetero o una sola familia tradicional y de nuevo tengo que aplaudir a la autora por no seguir los patrones y apostar por la diversidad absoluta y normalizada. Por otro lado, siento que me he saturado un poco de tanta revolución y tanto complot, quizás porque, como comentaba al principio, en los últimos meses he leído otro par de novelas igual de densas, con parecida dinámica política y similar extensión. Para mi gusto le han sobrado escenas o puede que alguna subtrama de personajes menos relevantes, pero también comprendo que esta apreciación puede ser lo más subjetivo que estoy comentando de la novela, porque no fuera el momento más idóneo para mí para leer este tipo de historia, que siempre requiere algo más del lector que simplemente sentarse a leer por entretenimiento. Sea como sea, el estilo de Arantxa Comes tiene la potencia suficiente como para que el libro guste sin necesidad de nada más; los demás elementos son complementarios para que nos enamore con los salseos o nos deje sin aliento si no podemos parar a respirar de lo adictiva que resulta la trama.

7/10

Resumiendo un poco lo anterior, la novela es el inicio de una pedazo de historia compleja trabajada en todos sus niveles: personajes, trama y ambientación. El equilibrio entre los tres vértices está bastante conseguido, aunque si bien es cierto que la trama se pilla al momento (una isla hundida en extrañas circunstancias, una corte llena de mentiras, una población sometida y descontenta, conspiraciones y alianzas), puede no ocurrir lo mismo con los personajes o el worldbuilding si no se presta la suficiente atención y, sobre todo, si no se tiene la paciencia necesaria para ir asimilando la cantidad de información que nos suelta la autora en los primeros capítulos. No es un libro de fantasía al uso más allá de que la ambientación es inventada, pero no hay magia ni criaturas fantásticas ni personajes con poderes (a excepción del poder de cambiar las cosas). Puede ser una buena recomendación para lectores habituales del género, pero entiendo que no es una lectura sencilla para alguien que no esté acostumbrado a meterse en estos berenjenales de numerosos personajes y lugares con nombres raros. Para esos indecisos siempre están los primeros capítulos que ofrece la editorial por aquí, aunque si os llamara la atención mi consejo siempre será que os lancéis a ciegas a descubrir la prosa de Arantxa Comes.

 

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