Autora:
Kerri Maniscalco
Título
Original: Hunting Prince Dracula
Editorial:
Puck, 2019
Traducción:
María Celina Rojas
Rústica
con solapas / ebook, 480 págs.
A la Caza de Jack el
Destripador #2
Género:
Thriller, Misterio, Histórica, Juvenil, Romance

En la esperada secuela del best seller «A la caza de
Jack el Destripador», se descubren extraños asesinatos en el castillo del
Príncipe Vlad el Empalador, también conocido como Drácula. ¿Podría ser un
simple farsante quien está cometiendo los crímenes... o el príncipe ha vuelto a
la vida?
Tras el dolor y el horror que le ha causado descubrir
la verdadera identidad de Jack el Destripador, Audrey Rose Wadsworth no tiene
otra opción más que huir de Londres y de sus recuerdos junto con el arrogante y
encantador Thomas Cresswell.
Rose viaja al corazón oscuro de Rumania, hogar de una
de las mejores escuelas de medicina forense de Europa... y de otro asesino de
renombre: Vlad el Empalador, cuya sed de sangre se convirtió en leyenda.
Pero el sueño de la vida de Rose, pronto se ve
frustrado por los sangrientos descubrimientos en los pasillos del imponente
castillo de la escuela, y se ve obligada a investigar asesinatos que le
resultan extrañamente familiares. Quizás, lo que encuentre despierte sus
temores más profundos.

El anuncio de la
publicación en nuestro idioma de esta saga fue para mí una de las mejores
noticias literarias el año pasado, por lol que automáticamente se convirtieron en imprescindibles para
mi estantería y a día de hoy se está convirtiendo en una de mis favoritas. A
pesar de que apenas han pasado unos meses desde que pude leer A la caza de Jack el Destripador, la
primera parte de esta serie de novelas de thiller
juvenil cuya reseña podéis leer aquí, he tenido tiempo suficiente para poder
acumular ansias de sobra para que este segundo libro me haya sabido a poco,
aunque físicamente tenga más páginas que el anterior. Así que ya puedo decir
sin miedo a equivocarme que la tercera parte (de momento, Escaping from Houdini en el original) va a ser para mí una de las
novelas más esperadas del próximo año y gracias a Puck apenas está pasando
tiempo entre una publicación y otra y eso siempre es de agradecer teniendo en
cuenta cómo se maneja a veces el tema de las sagas juveniles publicadas en
castellano. Para que leáis con tranquilidad, os aviso desde ya de que esta
opinión está completamente libre de spoilers
de cualquiera de los dos libros publicados hasta ahora.
Toda la saga tiene como punto en común a los personajes, su
historia personal y su evolución (y por eso convendría leerlos en orden,
obviamente) pero también aprecio que la autora ha sabido jugar muy bien las
cartas con las que contaba y, aprovechando que cada novela está dedicada a una
misteriosa figura relevante en la época victoriana, se ha molestado en
facilitar que se puedan leer de forma independiente. De hecho, los únicos personajes que repiten son los dos
principales, Audrey Rose y Thomas, mientras que otro par de secundarios de la
primera parte prácticamente solo aparecen nombrados y nada más, ya que el resto
de personajes son completamente nuevos. Por
ello, necesito hacerle una reverencia a Kerri Maniscalco por su pericia a la hora de
hacer menciones al primer caso de Audrey Rose en A la caza de Jack el Destripador pero sin hacer en ningún momento
ningún tipo de spoiler acerca de la
identidad del tristemente famoso asesino de Whitechapel que pudiera estropear
el misterio a los lectores que decidan leer esta saga como volúmenes
independientes y a la vez, así también respeta la realidad que ha llegado a
nuestros días de tal forma que aún seguimos sin saber con certeza quién mató a
varias prostitutas en los suburbios de Londres en 1888.
En esta nueva
aventura, Audrey Rose aún está asimilando ese final y las consecuencias que
tuvo para ella y su familia haber resuelto el caso gracias a sus conocimientos
en medicina forense y la ayuda de su compañero Thomas. Aquí empieza junto él su
viaje a Rumanía en el Orient Express
ilusionada porque va a estudiar en la Academia de Medicina y Ciencias Forenses
por méritos propios aun siendo mujer. Por otra parte, siente que está muy
tocada emocionalmente porque aún no ha logrado superar los horrores a los que
tuvo que hacer frente al final de la primera novela. El trauma que acarrea tras
aquello se hace muy patente en gran parte de esta novela en forma de
pensamientos recurrentes y de ideas obsesivas sobre si no será ella que esté
maldita en sí misma. Sin embargo, a pesar del alto precio personal que tuvo que
pagar para lograr que los asesinatos de Whitechapel cesaran, ahora tampoco está
dispuesta a que la gente siga creyendo que el vampiro más famoso de todas las
épocas ha vuelto y que esté causando el pánico precisamente en el pueblecito rumano
en el que Audrey Rose espera completar su formación científica.



9/10
Dicho de otro
modo, un segundo caso fascinante para unos personajes geniales a los que ya
conocíamos pero a los que aún no hemos terminado de ver en toda su evolución. La segunda novela de la serie ha estado a la altura de la primera y tendría
muy difícil elegir cuál de los dos casos me ha gustado más en su desarrollo y su
resolución pero lo que tengo claro es que esta saga está pensada para amantes
de las novelas góticas de misterio clásicas y la vez ideada para que cualquier
lector de aventuras juveniles pueda disfrutarla. Ha sido genial reencontrarme
con la encantadora Audrey Rose, conocer más a fondo al aparentemente frío y sin
sentimientos Thomas y quedar atrapada en un caso adictivo de un asesino en
serie que parece empeñado en cargarle el muerto al mismísimo príncipe Drácula.
Una clara recomendación para aquellos lectores que ya conocen esta saga de misterio
juvenil pero también un motivo más de peso para animar a quienes no lo han
hecho aún.
*Por último, muchísimas gracias a
Puck por haberme cedido un ejemplar con tanta amabilidad como siempre.
Otras novelas de la autora reseñadas en el blog
¿Os gustan las novelas
juveniles de misterio?
¿Conocíais esta saga
victoriana?