Autora: Beca Aberdeen
Editorial: Nova
Casa Editorial, 2016.
Tapa blanda con
solapas, 296 págs.
El Ángel en la Casa #1
Género: Ucronía,
Histórica, Romance, Juvenil.
En una Inglaterra victoriana alternativa, los hombres
han perdido el poder. Infectados con una bacteria que les deja dóciles y sin
voluntad, son repartidos como siervos personales. En la ceremonia anual, Amanda
Fairfax se decide por Callum, pues sus ojos la atrapan como los de ningún otro.
Pronto se da cuenta de que, en efecto, él no es como los demás. Callum es el
primer hombre normal en décadas. Un peligro para la sociedad dominada por las
mujeres. Un peligro para ella. Amanda tiene poco tiempo para satisfacer su
curiosidad antes de denunciarlo, pero este breve lapso junto a él es suficiente
para que ponga en duda todas las enseñanzas que ha recibido durante su vida.
¿Se habrá infectado Amanda?

Beca Aberdeen
era una de mis autoras pendientes desde hacía unos meses (de hecho, creí que
empezaría a leer antes su trilogía de ciencia ficción “Desterrados” y no ha
sido así al final, pero no tardaré en leer el primer volumen, “Secbra”. En
cualquier caso, creo que no tienen nada en común más que ese toque de ciencia
ficción, si es que “El ángel en la casa” puede considerarse de ese género, al
menos en la hipótesis que plantea como premisa.
Nos encontramos en Inglaterra
en pleno siglo XIX, pero no se trata de nuestra propia línea histórica de hace
dos siglos, sino de un pasado alternativo, cuando una bacteria infectó a todos
los humanos con cromosoma XY y voilà,
esa fue la única forma de que las mujeres dominaran el mundo. Literalmente
además, porque desde entonces cada una de ellas al cumplir los 18 años, tiene
derecho a un esclavo o siervo masculino para todo (incluido tener
descendencia), a los que les ordenan absolutamente todo lo que les plazca
mientras que las mujeres, inmunes a la bacteria, se dedican a todo lo que
anteriormente les había estado vedado, como estudiar, trabajar, dedicarse a la
política, no preocuparse por su reputación o simplemente llevar pantalones.
¿Interesante,
verdad? Pues así es toda la novela. A través de los ojos de los dos personajes
principales, Amanda y Callum, se nos muestra cómo de injustas han sido las
desigualdades históricas entre los géneros, y que aún perduran en la actualidad
(en unas sociedades más que en otras). Decir que este libro es súper feminista
es que quedarse muy cortita, porque va un paso más allá y le da la vuelta por
completo a los roles masculino y femenino. Aquí los sometidos y los que tienen
que luchar por su libertad y su reconocimiento igualitario, son ellos. Y las
que tienen que abrir los ojos y darse cuenta de la injusticia de la situación,
son ellas.

Cómo os decía,
Amanda es la jovencita acomodada, hija de la alcaldesa (firme defensora de la
esclavitud masculina) que cumple 18 años y a la que le asignan como esclavo
particular a Callum, que desde el primer momento parece tener la molesta tara
de ser inmune a la bacteria y estar “consciente”, con lo que las órdenes de
Amanda le entran por un oído y le salen por el otro. Amanda decide mantener a
su siervo defectuoso en secreto mientras ambos se van conociendo poco a poco y
cambiando su visión del mundo. La inocencia de Callum es simplemente
maravillosa, porque como si se tratara de un niño sin educar, Amanda tiene que
explicarle como funciona su sociedad y evidentemente, Callum no entiende el
porqué de tanta desigualdad.

Son todas estas
escenas, en las que ambos personajes van exponiendo sus puntos de vista y que
prácticamente es la totalidad de la novela, las que hacen que la trama sea muy
potente en cuanto al trasfondo. Pero además, el hecho de que Callum sea el
único hombre “despierto” y consciente de su propia esclavitud y de que Amanda
deba mantenerlo en secreto fingiendo que él obedece todo lo que ella le ordena,
genera todo tipo de situaciones cómicas y de contestaciones mordaces entre
ambos que no me esperaba que fuera a tener esta novela. Y en muchos momentos he
llegado a reírme con sólo imaginar lo absurdo de la situación. Y el final,
naturalmente, es digno de la típica trilogía distópica en el que la primera
parte te pone la miel en los labios y te la retira cruelmente. Sencillamente,
ha sido el final perfecto para una historia que promete muchísima más acción en
la segunda parte, porque como pasa en la mejores distopías, en algún momento
hay que tirar abajo el sistema, aunque en este caso sea del pasado y no del
futuro.
Los capítulos
cortos y los continuos diálogos entre Callum y Amanda dan un ritmo rapidísimo a
la historia, que además está en continuo movimiento porque la narración tan
fluida de la autora nos lleva a una época victoriana real alternativa, con sus
bailes, sus visitas de sociedad, sus cacerías, su compras en mercados…
Absolutamente todo nos mete de lleno en la época sin que seamos conscientes de
que todo está al revés. Así que en ningún momento la historia decae ni se hace
aburrida porque simplemente sentimos la curiosidad de conocer más de esa
sociedad que tanto conocemos por películas y libros al estilo Jane Austen, pero
aprendiendo cómo funciona esa misma sociedad regentada por mujeres en todos los
ámbitos.

El único punto
negativo que puedo encontrar, y que realmente me parece algo negativo a tener
en cuenta, es la falta de corrección final (al menos en la edición que he leído
yo). No es algo que me moleste especialmente si no repite mucho en una novela,
pero esta edición tiene falta de una corrección de estilo y de ortografía más
rigurosa. Por supuesto, a la trama y a la calidad de la narración no les afecta
para nada, pero sí influye en el resultado final de una buena edición. No llega
a empañar la sensación que deja al final de haber leído un buen libro, porque
es cuestión de forma y no de fondo, pero sí llega a ser un fallo cuando se
repite bastante.
Pero obviando
este pequeño detalle, ha sido una enorme sorpresa encontrarme con una historia
así de original y distinta a todo lo que he leído hasta ahora. Estamos
acostumbrad@s a leer distopías y ciencia ficción futurista pero, por lo menos
yo, nunca había leído una ucronía sin que sea del género steampunk, así que ya sólo por eso me ha tenido totalmente
enganchada por el mero placer de conocer cómo sería ese pasado alternativo de
hace dos siglos, además de estar ambientado en una de mis épocas favoritas y
tener de fondo la Inglaterra de finales del siglo XIX con la reina Victoria en
el trono.

En definitiva,
se trata de una novela que invita a la reflexión (no que la novela sea reflexiva) ya seas hombre o
mujer, porque desde luego te da otra visión de las desigualdades históricas de
género con un enorme “¿Y si hubiera sucedido así…?” Cualquier lector feminista
encontrará muchísimos puntos fuertes en las reflexiones de los personajes y
cualquier lector no feminista disfrutará igualmente con cosas que lo mismo ni
nos habíamos planteado y que simplemente las aceptamos porque “siempre ha sido
así”. Desde luego es una lectura recomendadísima que abrirá los ojos a más de
un@.
*Muchísimas gracias a Nova Casa Editorial por facilitarme un ejemplar de la novela y si algun@ sale convencido de leerla, os dejo el enlace aquí para que podáis conseguir vuestro ejemplar también.
¿Conocías la novela o la
autora?
¿Habíais leído alguna vez
sobre pasados alternativos?