RESEÑA Colisión

Autora: Ana Escudero Portal

Autopublicado, 2021

Correción: Maribel Abad Abad

Tapa blanda / Ebook, 355 págs.

La Tierra Quebrada #1

Género: Juvenil, Fantasía, Aventura

Vihria es la mediana de tres hermanos, huérfana de padre y con una madre enferma. Entrena cada día en la Academia de Combate de Egitea para unirse a la guardia y sacar adelante a su familia, pero a su madre le queda poco tiempo y no tiene dinero para comprar medicinas.

Una apuesta ilegal podría ser la solución a sus problemas, pero el objetivo no es otro que el Atlas Fragmentaria, el libro más importante de Egitea. Y Vihria no es la única persona interesada en él.

Yo también lo necesito.

Todo escritor cree tener el control sobre los universos que imagina, pero… ¿qué pasaría si acabaras en la tierra en la que ambientas tus historias?

Voy a comenzar comentando que no es la primera vez que leo a Ana Escudero Portal y que en aquella ocasión me llevé una sorpresa absoluta ya que partía sin expectativas con ella como autora, a quien solo asociaba a su profesión de correctora. Tenéis la reseña de Encontrarás quimeras por aquí si sentís curiosidad aunque os diré que es indiferente con qué historia comencéis a leerla porque os puede cautivar con ambas. Sin embargo, a diferencia de su anterior novelette, estamos ya con una historia completa que atrae tanto por el título tan impactante como por esa portada, empezando porque el pedazo de ilustración que se marca Libertad Delgado para ponerle cara a Colisión entra por los ojos de una forma evidente, así que si sois tan visuales y superficiales como yo, entenderé que nada más verla os haya captado la atención.

Entrando ya en materia y en trama, en esta ocasión, Ana Escudero se ha sacado de la chistera una metahistoria incluyéndose ella misma (supongo que es ella, aunque tampoco sería relevante) como autora en su propia historia y convirtiéndose en su propio personaje con trama propia. Es decir, una historia dentro de otra historia en la que la autora como tal se mete dentro como si fuera un personaje más, por si no me he explicado bien. ¿A que suena súper original? Bueno, realmente no lo es tanto, como la propia Ana Escudero comenta al final en sus notas de autora, pero aun así la osadía que ha tenido de probar algo tan difícil como es utilizar ese recurso y que le haya salido bien tiene un mérito tremendo y solo por eso merecería la oportunidad de ser leída. Aparte de la autora como personaje relevante, la protagonista en realidad es Vihria, aunque también podemos incluir como personajes principales a sus dos hermanos, que por mí hubieran tenido más peso en la trama principal y no como meros acompañamientos de la construcción de Vihria. La chica está deseando ser una más en la academia de combate aunque no se le da demasiado bien, pero la importancia que tiene en Egitea ser una buena guerrera le genera un presión constante. No sé si ha llegado a caerme bien del todo pero tampoco ha hecho falta porque como personaje me ha parecido bien construida y lo suficientemente interesante como para seguir sus aventuras con expectación y más cuando aparece en escena cierto personaje secundario, de profesión bibliotecario, que al principio puede pasar completamente desapercibido pero que a medida que avanzan sus escenas con Vihria, ha terminado por encantarme.

Por otro lado, el mero título ya dice bastante del worldbuilding que ha ideado la autora puesto que Egitea está concebido como un mundo “fragmentado” o dividido, en el que cada ciudad va como flotando como a la deriva en enormes placas terrestres sobre lava fundida. Cada determinado tiempo, chocan unas con otras con sus fragmentos flotantes y mientras dura ese acoplamiento aprovechan para hacer sus transacciones y sus intercambios de mercancías. Sin embargo, esta premisa solo es el mundo que ha dejado expuesto Ana Escudero, porque aunque también desarrolla algo política o sistema educativo, la verdad es que tengo la sensación de que simplemente es como un esbozo, ya que ha quedado meramente planteado pero todavía con mucho por explotar. Mi esperanza es que, llamándose La Tierra Quebrada junto a un subtítulo, sea parte de alguna serie de novelas que se desarrollen en el mismo mundo para seguir explorándolo y pudiendo ver más aspectos en los que seguro que ha pensado la autora pero no ha podido incluirlos todos. De todas formas, como comentaba al principio, lo verdaderamente destacable de esta novela es que la autora está tan tranquila escribiendo su historia cuando de repente se ve absorbida por la magia de sus propias palabras y aparece de repente en el mundo que ella misma ha creado. No sabe cómo salir, pero tras varios encuentros con sus propios personajes, viendo cómo se autocritica al observar lo planos o lo idiotas que pueden llegar a ser, llega a la conclusión de que necesita el mismo libro poderoso que pretende conseguir su propia protagonista Vihria, llamado Atlas Fragmentaria.

Al llegar aquí a mí la cabeza me explotó por todas las implicaciones que tiene para toda la trama, los líos que se pueden formar con el mero concepto de tener a la autora metida en su propia historia (¿Tiene el final pensado de antemano? ¿Lo provoca ella? ¿Puede morir? ¿Puede matar a su protagonista ella misma, literalmente?). Lo curioso es que por unas cosas y otras decide adoptar el rol más difícil que puede haber en una trama, porque no es fácil ser un buen villano y menos si tú misma has creado a tus enemigos, los héroes de la historia. Suena todo súper lioso y raro, pero creedme que es más sencillo de lo que parece cuando os lo cuento. Este concepto de metahistoria se asimila súper bien porque está enlazado de manera muy liviana, pero es como cuando hablamos de diferentes universos en los viajes en el tiempo, que es más sencillo verlo que explicarlo, vaya. Y Ana hace que todo sea tan ligero de leer y de absorber que la novela entera se puede leer en dos ratos sueltos sin perder el hilo y siendo difícil soltarla para hacer un descanso. También es cierto que la verdadera acción tarda un poco en despegar porque casi toda la primera mitad del libro va sentando las bases de ese worldbuinding y presentando a los personajes y sus movidas personales y familiares, los aprietos por los que pasa la familia de Vihria y sus altibajos en la academia. Es decir, esa primera mitad sirve para crear los conflictos y ver únicamente hacia dónde va la trama, pero pronto coge ritmo y el final se vuelve vibrante cuando todo confluye en las últimas escenas.

Como ya os dije al principio, la pluma de Ana no me era desconocida antes de comenzar esta novela y mi único reparo era no volver a setntir esa emoción de las primeras veces cuando descubres a una autora que se deja a sí misma el listón tan alto y luego tienes miedo de que lo próximo que escriba ya no sea lo mismo o no te haga sentir de la misma manera. Por suerte, no ha sido así para nada y esto solo ha ido a mejor en estilo, en trama y en subtramas y, ahora también, en el riesgo que supone haberse incluido ella misma como personaje de su propia historia y más como antagonista. Su estilo narrativo es claro, conciso y va al grano, no tiene párrafos densos y se limita a las descripciones necesarias que toda novela de fantasía debe tener para que nos hagamos una idea visual del contexto en el que nos movemos. La imaginación de la autora queda patente y me ha recordado en muchas ocasiones a las primeras obras de Laura Gallego, si la habéis leído, para que os sirva como referencia. No tengo ni idea de si esto tendrá continuación o no porque la historia es autoconclusiva, pero tengo claro que tanto el mundo que supone la Tierra Quebrada como los personajes que ha creado tiene una base muy sólida para seguir protagonizando historias o aventuras más allá de esta novela.

8/10

Para resumir un poco lo anterior, he tenido en mis manos una novela completa llena de imaginación y magia, con personajes curiosos, una trama muy interesante y una villana de lo más peculiar. Tiene una trama completamente original y me recuerda a las grandes historias de fantasía clásica como La historia interminable o La princesa prometida, con esas historias dentro de otras historias, con aventuras por todas partes, con un mundo maravilloso que solo queremos seguir conociendo y con personajes concebidos para que vivamos sus experiencias interesándonos por ellos, incluidos algunos de los secundarios que se han quedado un poco en la sombra, pero la recomendación sale sola cuando os digo que este libro es puro entretenimiento. No esperaba menos de Ana Escudero por lo que pude comprobar en su anterior y ha cumplido con todas las expectativas que tenía para esta novela de fantasía pura, me ha mantenido enganchada gracias a su trama adictiva y me ha fascinado con la creación de este nuevo mundo. Ojalá poder volver a Egitea en alguna otra ocasión.

*Por último, muchísimas gracias a Ana Escudero por haberme proporcionado un ejemplar para la lectura de esta historia.

**Los créditos de las ilustraciones que no vienen firmadas a quien correspondan.

 

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